Los desfiles femeninos de las Semanas de la Moda han revelado diez temas actuales para las colecciones de otoño/invierno 2023/24

Las Semanas de la Moda con colecciones para otoño/invierno 2023/2024, que comenzaron en Nueva York, siguieron en Londres y Milán y acabaron en París, marcaron la vuelta a la normalidad después de tres años de pandemia. Los compradores regresaron en masa y las marcas reanudaron las presentaciones físicas, mientras multitudes de personas volvían a los desfiles.

La temporada se centra en prendas bellas, de calidad, casi de alta costura. Sólo algunos destellos de rojo o amarillo iluminan un vestuario monocromático, con tonos neutros, especialmente el gris. Las colecciones de prêt-à-porter femenino para otoño-invierno 2023/24 destacan a una mujer resistente y poderosa que toma prestadas prendas del armario masculino. Es una elegancia sofisticada y sobria, pero lujosa. Una femme fatale que juega libremente con su feminidad, y que ha guardado en el armario sus prendas deportivas y sus chaquetas de plumón.

Los desfiles mostraron diez componentes fundamentales de la temporada, que ha presentado Fashion Network, con imágenes son de Imax Tree.

Recordamosa nuestros lectores que Pinker Moda ofrece mucha más información sobre tendencias. Por poner solo un ejemplo, pinchando aquí puede ver las del sector de lencería y baño para 2023/2024 que vimos en los salones de París (Interfilière y Lingerie).

El próximo invierno confirma la vuelta a una silueta chic, depurada y refinada. Recupera los clásicos del armario femenino, empezando por el traje con falda. Presente en todas las pasarelas, vuelve con fuerza junto al traje pantalón, también muy de moda desde hace varias temporadas. Realizado en tejidos masculinos tradicionales o en materiales inesperados, como el punto, se propone en formato mini o con la falda a media pierna, la chaqueta de hombros anchos, acortada o en forma de reloj de arena, para darle un toque retro.

Vestir bien, como si fuera el único placer que nos quedara, se está convirtiendo en el antídoto contra el ambiente preocupante que nos rodea. En este contexto, los diseñadores proponen una nueva formalidad, en la que la falda vuelve con fuerza. Ofrecen construcciones innovadoras con drapeados, cortes al bies, etc. Junto a la omnipresente falda lápiz de largo medio y recto, varios diseñadores reintrodujeron la falda corola acampanada, realzando una cintura de avispa al estilo New Look.

El cuerpo se desnuda, empezando por la espalda y los hombros, pero siempre con elegancia. Atrás queda el corsé con sus connotaciones eróticas. Esta temporada ha sido sustituido por el bustier, que puede llevarse bajo una camisa o una chaqueta para afinar la cintura. También puede llevarse tal cual, realzando el pecho y adaptándose a todas las morfologías. Los diseñadores hacen su agosto con él, utilizándolo en los armarios de diario, incluidas gabardinas y abrigos.

Este motivo retro, preferentemente en su versión clásica de lunares blancos sobre fondo negro que tanto recuerda a los años ‘50, vuelve a estar de actualidad tras el revival neoburgués. Algunos diseñadores innovan, jugando con efectos óptico-geométricos, como Marni o Benetton.Otros sustituyen el estampado por un accesorio metálico que aporte un toque algo más rockero, como se ha visto en Balmain, Off/White o Lanvin, entre otros.

Chic en cualquier circunstancia, la mujer del invierno 2023/24 sigue firmemente anclada en su tiempo. Puede salir medio desnuda con la mayor naturalidad, casi sin que se note. Se acabaron las faldas y los pantalones. Unas mallas, opacas a ser posible, y unas buenas bragas bastarán, combinadas con una chaqueta bonita, preferiblemente tres cuartos, o incluso simplemente un suéter un poco grande. Esta tendencia sin pantalones, iniciada por algunas famosas, se está abriendo paso de forma notable en las colecciones de invierno.

En la misma línea desinhibida, la mujer no duda en mostrar su ropa interior. Pero cuidado, no se trata de jugar a la muñeca sexy. Todo es cuestión de actitud. Nada será más cool el próximo invierno que dejar que la enagua o las medias sobresalgan de la falda, deslizadas a la vista sobre un suéter de punto o una chaqueta. El sujetador se muestra bajo un modelo escotado de Lanvin o en un vestido asimétrico de brazos descubiertos de Gabriela Hearst. Por no hablar de las bragas blancas que aparecen bajo conjuntos transparentes. Pero lo mejor son los calzoncillos blancos de caballero, que se suben bajo una falda chic, siguiendo la tendencia que lleva años en boga entre los hombres, cuyos pantalones de cintura baja muestran sistemáticamente la ropa interior.

Otra tendencia fuerte es la de dejar el pecho al descubierto. Muchos desfiles de moda causaron sensación con al menos un look muy marcado, en el que los pechos apenas quedaban ocultos por diminutos sujetadores. Un par de tirantes en Sportmax, un cinturón en Heliot Emil, dos cucharas plateadas en la sueca Hodakova, una pluma en Ann Demeulemeester, un micro-bikini metálico en Gucci, una flor cubrepezones en David Koma y Nensi Dojaka o un parche pirata en Vaquera. La tendencia descamisada está en alza, con mujeres que se enfundan chaquetas y trajes sin nada más.

Las Semanas de la Moda han seguido poniendo de relieve la prendas recortadas, o cropped, como dicen sobre todo en Estados Unidos. Para el próximo invierno, los diseñadores han recortado todo al máximo. Las piezas de arriba se acortan sistemáticamente. Desde chaquetas cortadas por debajo del pecho, adoptando la forma de boleros, hasta pieles transformadas en hombreras, pasando por sudaderas y otros suéters que dejan al descubierto el ombligo. Todo vale, incluidas las chaquetas de plumas y los blusones.

Con el regreso de las piezas sastre confeccionadas con tejidos masculinos, con especial atención a los abrigos largos y las chaquetas cuadradas, las mujeres se apoderan en gran medida de los códigos masculinos. Pero, una vez más, los diseñadores reinterpretaron estos códigos. Así, el chaleco del traje de tres piezas actúa como una nueva camiseta de tirantes, mucho más chic que una simple prenda de punto. Se lleva pegado a la piel, sin camisa, bajo la chaqueta del traje, o combinado con un pantalón.

El uso de la corbata es un último tema que se ha visto en las Semanas de la Moda. Todavía en el registro masculino, este accesorio está reapareciendo en los armarios femeninos. Valentino le ha dedicado toda su colección para el próximo invierno. Se impone la corbata negra, anudada sobre la clásica camisa blanca. Pero también se puede llevar de lunares, tono sobre tono o deshecha como un pañuelo.

+ Info: https://es.fashionnetwork.com/news/Desfiles-femeninos-las-10-tendencias-para-el-invierno-2023-24,1495324.html

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